Para elaborar el mejor plan de control del dolor, es fundamental que puedas darle a los médicos y las enfermeras una descripción detallada de lo que sientes, y cuándo y dónde lo sientes. Para ello, puedes llevar un registro diario del dolor que sientes, ya sea en un cuaderno o en una computadora. Comienza enumerando todos los medicamentos para el alivio del dolor que tomas, las dosis y la frecuencia con que los tomas, como también los demás medicamentos recetados y no recetados que tomas.
El dolor crónico puede inhibir la calidad de vida de un individuo importante y el establecimiento de configuraciones entre los gatillos que empeoran o aminoran dolor puede ser difícil. Un diario del dolor para registrar estas configuraciones y gatillos puede ser útil para perfeccionar el mando de la administración del dolor.
Un diario del dolor puede desempeñar un papel instrumental en la administración del dolor crónico y ayudar a profesionales de salud a ganar una comprensión completa del dolor experimentado por el paciente. Esto ayuda a evitar entrehierros en la historia, y ciertas configuraciones que se pueden dirigir con o sin la intervención farmacológica pueden ser ejecutadas.