La mayoría de las cabañas de madera y las casas de troncos son menos dañinas para el planeta que las residencias típicas. Obviamente, las casas de cedro blanco están construidas con un material que es un recurso natural.
Los registros de los árboles también se pueden encontrar en la mayoría de las áreas locales, a diferencia de otros recursos, que pueden requerir transporte en varios estados o condados.
Ya que las casas de madera tienen la capacidad de absorber y liberar calor, las cabañas de troncos mantienen un nivel de confort deseable durante todo el año, sin importar la temporada.
Al elegir hogares que sean amigables con el planeta y económicamente seguros, hay más esperanza para el futuro de nuestro medio ambiente. Las cabinas de madera que ahorran energía son estéticamente agradables, prácticas y asequibles.
Una vez que su uso ya no es necesario, simplemente pueden devolverse a la tierra o usarse para leña. Obviamente, el cedro blanco y otras casas de madera son reciclables. Los troncos viejos se pueden reutilizar para crear otras casas o edificios.
