Ya sea que estés comprando una casa, peleando sobre una cuenta de tu teléfono, pidiendo más millas frecuentes, regateando en China o pagando tu tarjeta de crédito, los principios básicos de la negociación son los mismos. Sólo recuerda que incluso los negociadores con más experiencia sienten un poco de incomodidad al negociar. La única diferencia es que un negociador bloquea esos sentimientos.